Formas de evitar impagos en comercio internacional

En este artículo analizaremos diferentes fórmulas para evitar impagos en operaciones de compraventa internacional de mercancías
Uno de los problemas más importantes del comercio internacional son los impagos, no sólo por el perjuicio económico que puede causar a la empresa exportadora, sino por el trabajo y recursos que puede llevar su reclamación y la rotura de confianza en el comercio internacional, Por ello resulta fundamental ser precavido y establecer fórmulas o estrategias para evitar impagos en operaciones de comercio internacional. Entre estas tenemos
- Anticipos o pago por adelantado
- Pago por documentos
- Seguro de impago
- Pago con aval o garantía
- No realizar la exportación
El sistema más seguro para evitar impagos en comercio internacional y el más económico para el exportador es sin duda el pago por anticipado . Se trata de que el comprador pague el pedido incluso antes de recogerlo. Esta fórmula se suele hacer con pedidos pequeños o de prueba, primeras operaciones o cuando el vendedor por su tamaño o prestigio establece las condiciones de compra. Sin embargo en general no es la fórmula de pago más habitual, sobre todo si el comprador es grande.
Una variante de la anterior es el pago con un porcentaje anticipado. Esta fórmula puede negociarse con el cliente, sobre todo si este solicita un pago aplazado que conlleva un coste financiero o si se trata de una operación que conlleve un gran volumen de mercancía o tenga un valor muy alto. El conseguir más o menos anticipo será uno de los puntos de negociación con el cliente internacional

Una de las fórmulas más utilizadas para evitar impagos en comercio internacional es el sistema de pago contra documentos. En él se garantiza el pago de un pedido si el vendedor reúne y envía los documentos que se acordaron en la apertura del sistema documental. Dentro de este tipo de sistemas de pago se encuentran las remesas documentarias o la carta de crédito . Este tipo de sistema de pagos tiene dos grandes desventajas: Generalmente es complejo y largo de gestionar y además suele llevar un coste asociado por el banco bastante elevado.
Una de las opciones más habituales es la contratación de un seguro de impago sobre la mercancía negociada. Es una opción rápida de gestionar y el coste de la prima suele ser bastante asequible en la mayoría de las operaciones de comercio internacional. La parte negativa es que si se diera el imago la aseguradora no suele cubrir el total de la operación, y el cobro del seguro en ocasiones es tedioso y largo. Además ciertas operaciones de venta bien a países o bien a clientes con riesgo sólo cubren una cantidad o un porcentaje (generalmente escaso) o ni siquiera lo cubre.
Actualmente muchas aseguradoras ofrecen un seguro multirriesgo que cubre diferentes riesgos que se pueden dar en comercio internacional tales como impago, de cambio, de transporte, etc.
En ocasiones, por ejemplo en ciertas operaciones de suministro periódico de una mercancía o materia prima, el comprador aporta un aval o garantía (que puede ser por ejemplo el pago de una cantidad de dinero) que puede ser reclamado por el vendedor en caso de problemas o impago. Con ello se evita la contratación de un seguro y ese ahorro se puede repercutir en el precio de la mercancía.
Y por último también cabe señalar como fórmula para evitar impagos es la no realización o cancelación de todas aquellas operaciones de ventas que tengan mucho riesgo o que puedan resultar sospechosas de ser timos o fraudes. Para ello se puede consultar información de aseguradoras, bancos, o bien consultar a la embajada del país de destino